Enormes olas tratando de destruir todo
Llegan a la costa desfigurándose
Todas terminan marchándose
No se diferencian de entre el montón
Arena vuelta carbón
Magma se desprende de lo mas alto
El ritual de un parto
Sirenas que gritan
Otro corazón que no palpita
Desdichados y bendecidos
En el mismo abismo
Coreografía divina
Que termina en cinco esquinas
Cada una de origen oscuro
Cada una levanta otro muro
Desesperación por cada obstáculo
Arrodíllense ante el tabernáculo
Cierren sus manos
Juntos rezamos
Veo un rostro azul
Pálido y lleno de llagas
Mascara guardada en el baúl
Como otro millón de caras
Nada como ver como se derrite
Aquel ídolo que tanta luz emite
Cabeza de cera, busto de roble
Quiso ser el mas noble
A sus pies incontables piedras
Sus palabras cubiertas de hiedra
Ya nadie recuerda
Ya nadie recuerda
Barrotes y una comida a medias
Azotes y gente vuelta hienas
Citemos otro texto
Arrebatemos otro dedo
La llave esta escondida
Entre la caja torácica podrida
Extiende tus manos
Abrazados como parientes lejanos
Veo una ciudad amarilla
Todo lo que veo brilla
Ni un solo jarrón de arcilla
Oro puro hasta las encías
En constante movimiento
Un verano es un invierno
Nadie escucha la mentira
Todos temen de su ira
Ya nadie sangra ni llora
Equilibrio entre fauna y flora
Deja de sudar mi frente
Dejo de tener miedo a quien tenga enfrente
Valió la pena sufrir
Ver a tanta gente partir
Entre oceanos, montañas y ciudades
Curado de todos los males
Juntos como hermanos
Juntos como mas que hermanos
No siento mis manos
Como si hubieran pasados mil veranos
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